Fernando está comprometido con compartir y transmitir educación financiera como una filosofía de vida a toda América Latina.
Fernando González es el representante de Robert Kiyosaki para el mundo hispano desde hace más de 25 años.
A sus 13 años, ingresó a un colegio militar como parte de la tradición familiar. La experiencia que vivió en el internado lo marcó para toda la vida; en sus palabras, “uno valora algo realmente cuando lo pierde y en el internado yo perdí mi libertad, que es lo más grandioso que el ser humano puede tener”.
A los 17 años ingresó a la Escuela Naval del Perú, institución que le ayudó a forjar su carácter y que además le permitió convertirse en Oficial de Marina, logro del que se encuentra muy orgulloso hasta la actualidad ya que se considera un “Marino hasta la muerte”. Sin embargo, una vez retirado a los 31 años es que inicia su historia como emprendedor.
Desde muy temprana edad, Fernando se ha considerado a sí mismo como un alma libre y también rebelde. Comenzó a perseguir su libertad en el contexto de un sistema que lo forzaba a obedecer y memorizar materias teóricas en las que no estaba interesado, por lo que afirma que “la educación académica lo deprime y que el problema no era la escuela militar, ni cualquier otra escuela, era él que no podía adaptarse al sistema”; sin embargo, cuando conoce la educación financiera de la mano de Robert Kiyosaki, se da cuenta que la educación real era muy diferente. Era una educación para ser libre y por eso, no dudo en comenzar a seguir a este gran maestro.
Luego de asistir a varios de los eventos y entrenamientos de Kiyosaki, y gracias a su hambre de éxito, deseo de superación, consistencia y motivación de romper con lo establecido por los Falsos Maestros, es que Robert Kiyosaki confía en Fernando como su gran aliado en la misión de “Elevar el bienestar financiero de la humanidad” y así se convierte en su representante oficial para el mercado latino.
Ahora llevan más de 25 años recorriendo el continente e impactando en las vidas de miles de emprendedores. Por esta razón y por el gran compromiso con la misión, Fernando decide fundar en el 2020 a Rich Dad Latino, empresa cuyo equipo él mismo preside.
Su más profunda aspiración, es dejar un legado de personas libres, que no dependan de intercambiar su tiempo por un sueldo para vivir, que además entiendan que la riqueza no consiste solo en tener mucho dinero, sino en cumplir sus propósitos de vida y en la capacidad de servir al prójimo.
Finalmente, lo único que es tan importante para Fernando como la misión, es su mayor activo, la familia. A los 33 años de edad se casó con Cecilia, tuvieron tres maravillosas hijas y juntos, comparten ese espíritu emprendedor y gran pasión por cumplir cada uno de sus sueños en la más profunda libertad.